La pandemia ha forzado a muchas empresas a comercializar sus productos y servicios de manera virtual. Han quedado atrás muchas de las acciones presenciales sobre las cuales, gran parte de las empresas basaban la captación de nuevos clientes y negocio.
Quizás, la venta virtual no es tan nueva como nos pensamos. Si miramos atrás podemos observar como ya íbamos utilizando el correo electrónico, llamadas, medios audiovisuales y otros para llegar a impactar comercialmente.
El que realmente nos ha llevado la Covid ha sido la distanciación social y la imposibilidad física que las vendedoras y vendedores tradicionales interactúen presencialmente con sus clientes y prospectos.
Expertos en comercialización como Lowder, autor de Smooth Selling Forever, afirman que la venta virtual ha llegado para quedarse y que no tan solo se mantendrá sino que crecerá exponencialmente.
Ante este escenario, nos encontramos de nuevo en como las empresas y equipos comerciales tendremos que adaptar nuestras competencias para seguir siendo competitivos:
Una venta virtual, eficiente, con costes más bajos, ciclos más cortos y con buenos resultados, es posible y es una realidad. Empresas y equipos comerciales estamos ante el reto de descubrir y transformarnos para poner en práctica los modelos comerciales más adecuados a nuestra organización.