¿Qué es el salario emocional?

09.02.2022

 

El salario emocional consta de todas aquellas retribuciones que la empresa da a los trabajadores y que no son monetarias. El concepto surgió hace unos años como un añadido del salario retributivo que ya conocemos. Así pues, con el salario emocional la empresa ayuda a cubrir necesidades personales, familiares y profesionales de su plantilla para favorecer su calidad de vida e impulsar su desarrollo.

 

En un principio, el salario emocional era visto un modelo utópico difícil de implementar, que venía de la mano de grandes empresas. Con el tiempo, y sobre todo el choque que supuso la pandemia, esta idea de retribución se ha ido expandiendo a todo tipo de empresas, adaptándose a cada una de ellas.

 

La idea de aplicar este tipo de beneficios, que van más allá del incentivo económico, pretende mejorar la calidad de vida de los trabajadores y trabajadoras. Al mismo tiempo, estos no paran de crecer profesionalmente y, además, se desciende el índice de rotación y se consigue retener el talento. El objetivo es que el equipo esté más satisfecho en la empresa y, como consecuencia, más motivado al trabajar.

 

Aunque este concepto es relativamente nuevo, existen empresas y departamentos de recursos humanos que seguramente hace años que lo aplican a través de ofrecer diferentes beneficios a sus trabajadores/as.

 

 

Algunos ejemplos de salario emocional:

 

  • Formación por parte de la empresa: proporcionar cursos, información o eventos al equipo para que sigan mejorando como profesionales.
  • Teletrabajo: con el confinamiento, las empresas tuvieron que confiar en sus trabajadores/as para que realizaran el trabajo desde casa. Desde entonces, la flexibilidad para teletrabajar es mucho más común.
  • Horario flexible: se trata de dar flexibilidad en las horas de entrada y salida al equipo, siempre que se acaben haciendo las horas u objetivos pactados.
  • Reconocimiento y comunicación: a todo el mundo le gusta sentirse valorado. Para que tu equipo se sienta así, es muy importante felicitar, escuchar y dejar participar en la toma de decisiones a los empleados siempre que sea posible.
  • Servicio de guardería: facilitar la conciliación entre las obligaciones parentales y del trabajo.
  • Áreas de trabajo agradables: proporcionar un buen ambiente de trabajo, sea con plantas o decoración, y una zona de descanso.
  • Promoción interna: demostrar a los trabajadores y trabajadoras que su esfuerzo tiene recompensa con oportunidades reales de crecimiento dentro de la empresa.
  • Beneficios sociales: otras acciones como descuentos en el gimnasio más cercano, un seguro, la organización de actividades de teambuilding, entre otras muchas ideas.

 

 

Así pues, vemos que no existe una manera universal de aplicar el salario emocional, sino que se trata de analizar la situación y saber qué puede ofrecer la empresa y que puede motivar al equipo.